El arte de la influencia: Pau Massola
- Capítulo #3 de la serie de Fonoma: “Influencers en Cuba”
Pau Massola tiene solo 21 años, sin embargo, su versatilidad la ha llevado a actuar en teatro, cine y televisión. Desde los 13 años presenta Lucas, uno de los espacios musicales más famosos de la TV cubana. Tiene un programa en Youtube: “Te lo dice Pau”, en el que ha entrevistado a un centenar de artistas, y un canal recién estrenado. En las redes, es una de las jóvenes cubanas con más seguidores: supera los 110 mil en Instagram y los 28 mil en Facebook.
Paula es también familiar y alegre. A ratos, mientras conversamos, habla de su madre con una mezcla de admiración y cariño. En sus redes, suele saltarse las “reglas” de una instagrammer para compartir una foto con la familia. Es además muy unida a su hermana, pese a que desde hace 5 años están separadas por el estrecho de La Florida.
Una infancia entre cámaras
Paula Daniela Rodríguez Massola empezó desde niña a trabajar en los medios. Apenas a los 7 años intervino en el teleplay La ronda del asesino, junto a Isabel Santos. Luego, durante varios cursos, presentó los programas educativos El mundo del revés y Para ser mejores.
La inclinación de Paula por el arte es prácticamente genética. Su madre Edith, es una de las actrices y presentadoras más conocidas de Cuba; su padre es el actor Abel Rodríguez y su hermana mayor, Natalia Tápanes Massola, igualmente debutó como cantante y actriz desde muy joven.
Desde pequeña trabajas en la televisión… ¿cómo fue tu niñez?
Nunca recuerdo tener un curso de escuela donde llegara tranquila a la casa. Desde segundo o tercer grado en la primaria estuve súper ajetreada con trabajo. A veces me iba temprano de la escuela porque tenía grabación. Fue algo con lo que crecí. Eso me inculcó el amor por el trabajo y la responsabilidad para llevar todo a la misma vez, tanto la escuela como la parte profesional.
¿Siempre te gustó o a veces simplemente querías salir a jugar?
Siempre me gustó. Nunca fue impuesto por nadie ni obligatorio.
Crecer en una familia de artistas supone un aprendizaje permanente, pero imagino que es una presión extra para tu carrera…
Para mí ha sido difícil porque la gente me presiona desde el inicio y debo romper con eso. Aprendo todo de mi mamá, pero a la vez creo mi propio estilo. No obstante, siempre se predisponen ante lo que voy a hacer, ya sea conducir o actuar. A veces me dicen: “qué bien lo hiciste, no me lo esperaba”, porque esperaban menos. Algunas personas piensan: “ella está aquí por su familia”. Y para nada, ha sido complicado porque me exijo más y tengo más responsabilidad.
“Pensaba que sería el final de mi carrera”
A los 14 años Paula era una adolescente que lidiaba con la fama de salir en la TV y pertenecer a una familia exitosa en el mundo del espectáculo.
Entonces enfrentó el primer fracaso: desaprobó las pruebas para entrar a la Escuela Nacional de Arte (ENA). “El mundo se me quería caer”, recuerda. Sin embargo, con el tiempo agradeció aquella lección: “a partir de ese momento le di la importancia que realmente llevaba la carrera”. Estudió muchísimo y al siguiente año aprobó para cumplir su sueño de estudiar Teatro.
¿Qué pasó por tu mente cuando suspendiste las pruebas de la ENA?
Hasta ese momento, en noveno grado, yo no había tenido nada negativo, también por la edad. Lograba mis propósitos, todo iba bien. Ese fue el primer golpe porque era algo que yo quería con todas mis fuerzas. Era mi única opción, no ve me veía en ninguna otra porque estaba confiada en que iba a aprobar y sería mi próxima escuela.
Hice las pruebas, eran 3 cortes y no pasé al último taller. Se me quería caer el mundo porque ya había creado la expectativa de poder entrar. Toda mi familia estaba el día de la prueba esperando en plan “le van a decir que sí”. Me quedé un buen rato dentro y los profesores me dijeron: “ya tienes que salir”. Empecé a llorar. Estuve una semana entera con un bajón tremendo. Pensaba que sería el final de mi carrera.
¿Cómo influyó todo esto?
Fue lo mejor que me pudo haber pasado. Luché tanto para poder entrar, fui mucho al teatro, me di cuenta que no era un juego ni dependía del talento con el que puedas nacer, sino de muchas cosas y de tener madurez.
Fue un motivo más para levantarme y volver a presentarme en la ENA. Aprobé y estudiar Teatro es lo mejor que me ha pasado hasta ahora.
¿Y qué impacto tuvo la Escuela de Arte en tu vida?
En la ENA aprendes a entender la reacción ante las cosas y conocerte a ti mismo. Además de los talleres de actuación, los métodos y la dramaturgia. Leí muchísimo y eso abrió mi mundo hacia otras fronteras. Estudiar en la Escuela de Arte me enseñó a defender lo que soy y lo que siento.
Actriz / Presentadora / Influencer
El primer gran salto en su carrera fue cuando Orlando Cruzata la seleccionó para presentar Lucas, hace ocho años ya de aquel momento. El lazo de la menor de las Massola con este programa es muy especial porque su madre fue la anfitriona fundadora. “Para mí era un lujo tremendo. Me agarré con mucha fuerza al casting y desde la secundaria estoy en Lucas… hasta que la muerte nos separe” (risas).
Luego, mientras estudiaba en la ENA, se unió a la prestigiosa compañía de teatro El Público, dirigida por Carlos Díaz. También interpretó un papel en el dramatizado de la TV: El bardo inmortal. “Ahora no quisiera verlo, porque fue hace mucho tiempo y seguro no me gustará mi actuación” (risas).
Una vez graduada, fue protagonista en el teleplay Mentiras de cristal, dirigido por María Isabel Díaz y Magda González. Recientemente, igual bajo la dirección de Magda, estuvo en el telefilm Para toda la vida, próximo a estrenar.
En el último año, Pau Massola ha estado más concentrada en su trabajo en las redes. Inició un programa de entrevistas en Youtube, abrió su propio canal y se convirtió en una de las instagrammers residentes en la Isla con mayor éxito.
¿Crees que ser instagrammer o youtuber pueden será algo a largo plazo en tu vida?
Creo que indiscutiblemente va a durar en el tiempo. Youtube es un fenómeno grandísimo, prácticamente está desplazando a la TV. Las redes sociales van creando como una especie de curriculum.
¿Cómo surge “Te lo dice Pau”?
Los dueños del canal Familia Cubana, quienes emigraron a Estados Unidos hace muchos años, fueron quienes me contactaron. Desde hace un tiempo estaban buscando hacer un segmento de entrevistas a artistas.
Pienso seguir con esto y lo veo como algo a largo plazo. Quiero perfeccionar cada temporada. Llevamos más de 100 capítulos. Yo misma veo la primera entrevista que hice y me doy cuenta cómo he cambiado.
¿Has pensado iniciar un proyecto personal en Youtube?
Siempre quise un canal de Youtube, pero me imaginaba la clásica youtuber contando mi vida. Nunca se me había ocurrido hacer algo así. Hasta ahora no es nada que pueda confirmar ni tengo pensado un contenido específico, pero sí me gustaría.
¿Qué prefieres: Youtube o Instagram?
¡Qué difícil! (risas) En Youtube tengo un equipo que me quita la presión y el trabajo detrás de cámara. En el caso de Instagram no lleva mucho trabajo porque es mi vida. Lo más complicado es crear contenido. A veces tengo inspiración para hacer videos, pero me falta la cámara, las luces, la edición… cosas que yo no sé hacer. En Youtube cuento con un equipo que se encargan de eso. Creo que si tuviera que elegir me quedaría con Youtube.
Tener tantos seguidores es una gran ventaja, pero también un gran responsabilidad, tu voz la escuchan miles de personas…
Cada vez que voy a escribir algo pienso mucho antes porque las personas se pueden decepcionar o guiarse por lo que yo digo. Con mi edad quizás otra joven actuaría y ya. Pero tengo cierto filtro que debo pasar. En mis páginas todo lo llevo yo. Error que cometa, error del que aprendo.
Desde el punto de vista económico, ¿resulta factible ser influencer en Cuba?
Trabajar en las redes tiene ciertas ventajas aunque toma bastante tiempo ver los resultados. Lleva mucho esfuerzo, como lo han hecho los youtubers cubanos que hoy viven de eso. Para hacer publicidad debes ser profesional y tener una opinión respetada, sino eres una modelo que solo te haces fotos.
Llevo varios trabajos a la vez y aun así siento que no me alcanza porque me imagino manteniendo una familia, a mi abuela, mi tía, mi mamá… Para eso no alcanza. Sí es cierto que llevo el control de mi economía y puedo permitirme algunas cosas que otros jóvenes lamentablemente no pueden. Puedo mantenerme, ahorrar y organizarme, con todas las limitaciones que existen.
Retomar los estudios y la actuación
A pesar de todos los proyectos en los que interviene, Paula siente que durante el último año y medio no ha hecho suficiente, porque ha estado alejada de la actuación. Aunque reconoce que su trabajo en las redes sociales le ha servido de mucho.
¿Cómo imaginas tu futuro y qué planes tienes?
Tengo muchas ambiciones y objetivos, pero no sé cómo voy a lograrlo todo (risas). Lo primero es que como actriz quisiera estar en el cine y en la TV. El teatro me encanta pero lleva más tiempo.
Además, me gustaría entrar en la FAMCA (Facultad Arte de los Medios de Comunicación Audiovisual, perteneciente a la Universidad de las Artes). Creo que estoy un poco tarde, pero veremos si todo fluye. Lo que no puedo es estar en pausa y decir “ya terminé los estudios”. Siempre quiero añadir nuevas metas en todas las especialidades que pueda.
*Nota: Todas las imágenes que aparecen en el artículo fueron tomadas en marzo, antes de las medidas de aislamiento por la Covid-19.
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